¿Entregar 20 millones de conversaciones privadas? Eso es una grave violación de la privacidad que no podemos ignorar. El concepto de privilegio de IA es crucial aquí: nuestras interacciones con los sistemas de IA merecen la misma protección que cualquier comunicación confidencial. Estas conversaciones deben permanecer privadas, punto. La línea entre la innovación y la intromisión se está volviendo más difusa, y necesitamos resistir antes de que sea demasiado tarde.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
¿Entregar 20 millones de conversaciones privadas? Eso es una grave violación de la privacidad que no podemos ignorar. El concepto de privilegio de IA es crucial aquí: nuestras interacciones con los sistemas de IA merecen la misma protección que cualquier comunicación confidencial. Estas conversaciones deben permanecer privadas, punto. La línea entre la innovación y la intromisión se está volviendo más difusa, y necesitamos resistir antes de que sea demasiado tarde.