Estar atrapado es el camino inevitable para la mayoría de los inversores, lo más agotador es seguir pasivamente las fluctuaciones del mercado y caer en el cansancio de lidiar con ello.
En realidad, estar atrapado no es el fin del mundo, no dejes que la fluctuación a corto plazo te descontrole: las pérdidas flotantes en la cuenta son solo números en movimiento, no se consideran pérdidas reales; mientras tengas la posición en la mano, todavía estás en la mesa, mientras no pierdas tus fichas, hay posibilidad de recuperación.
Mantén la calma y actúa con prudencia, cuando el mercado se invierte
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